Desde ya hace tiempo se conocen los beneficios de la miel para mantener una salud impecable en la piel, hacerla lucir sana y radiante. Pero, ¿por qué es tan benéfica para la piel?, la respuesta se encuentra en sus nutrientes, los cuales tienen tantas propiedades que incluso es usada para el tratamiento de quemaduras y heridas leves en la piel.
Sus beneficios tópicos se reflejan en la salud de la piel, ya que puede ayudar a renovar sus células, aportando efectos desinflamatorios, regeneradores y nutritivos sobre el cutis. Diversas cremas se benefician de sus propiedades incluyendo como el principal activo en sus fórmulas, y complementandola con otros ingredientes, y de esta forma potenciando sus efectos sobre la piel.
Regenerar, ese es el principal beneficio de la utilización de la miel en nuestra piel, sus antioxidantes son en gran medida los causantes de sus efectos sobre ella. Y es que además de estos la miel también posee minerales como calcio, cobre, hierro, magnesio, manganeso, zinc, fósforo y potasio, y vitaminas ( C, D, E y B).
Todos estos compuestos hacen que la miel sea usada en combinación con otros ingredientes como el azúcar o el limón en forma de mascarillas para hidratar y exfoliar la piel.
Pero si estás pensando en aplicar una mascarilla o cremas a base de miel, te recomendamos que limpies perfectamente la zona con agua y jabón, ya que así retiramos la mayor parte de suciedad de los poros de tu rostro y dejaras que este absorba todas las propiedades que esté dorado ( y dulce) ingrediente puede aportar a ti y tu piel.